Obesidad y enfermedades asociadas
La cirugía para la obesidad ha demostrado ser efectiva no sólo en el tratamiento de la obesidad mórbida a lo largo del tiempo, sino también, y lo que es aún más importante, en el tratamiento y hasta en la resolución total de las enfermedades asociadas a el. Estos importantes descubrimientos no sólo dan una gran luz de esperanza a los pacientes con obesidad sino que también abren nuevos caminos a la investigación y pueden llegar a cambiar la visión actual de la fisiopatología.
El aumento de algunos padecimientos como la hipertensión, la resistencia a la insulina, la intolerancia a la glucosa, entre otros, se encuentra estrechamente relacionado con el aumento de la obesidad y su consolidación como una epidemia global. Todas estas patologías asociadas disminuyen considerablemente la expectativa de vida de la persona con sobrepeso, incluso de aquellos que no padecen obesidad mórbida, y aumentan los riesgos de padecer algún tipo de enfermedad cardiovascular o diabetes del tipo II. Cada año, casi tres millones de personas fallecen como resultado de tener sobrepeso y obesidad y ya es la quinta causa de muerte en todo el mundo.
A nivel económico, la obesidad y sus complicaciones causan un impacto formidable en la familia y la sociedad. Al ser una enfermedad progresiva, la obesidad condiciona al enfermo y a su familia a afrontar cada vez mayores gastos y nuevos inconvenientes. Anualmente se invierten miles de millones de dólares para tratar este padecimiento o alguna de sus complicaciones. Es necesario encontrar un camino que brinde soluciones al paciente y su familia sin destruir su economía y en un plazo considerable de tiempo.
La cirugía bariátrica ha demostrado ser efectiva en el tratamiento de estos problemas: cerca del 80% de los pacientes con hipertensión la superan tras la operación, los marcados bioquímicos de riesgo cardiovascular disminuyen notablemente, detiene la progresión de la intolerancia a la glucosa, disminuyendo así el riesgo de padecer diabetes tipo II, ayuda a revertir otros problemas asociados al síndrome metabólico, como la resistencia a la insulina.
A pesar de estos resultados, la cirugía no es una opción
válida para la mayoría de los pacientes. Sólo aquellos pacientes con un IMC de
35 o más, podrán ser candidatos a la
cirugía.
Cabe mencionar también, que algunos pacientes con Índices de Masa Corporal por debajo de 35 podrían ser candidatos para cirugía de Obesidad, basados en criterios muy estrictos de selección.
Al someterse a una
intervención quirúrgica para tratar su obesidad, Usted no sólo podrá lograr su
peso deseado y mantenerlo en el tiempo, sino que también podrá revertir cuadros
que lo han acompañado en este largo proceso como la hipertensión o la diabetes.
Hable con su médico acerca de sus posibilidades, hay una buena opción para
Usted que puede salvar su vida.
Recuerden siempre; el primer paso para superar la obesidad es reconocerla como una enfermedad.
Un saludo,
Dr.
Héctor Bernal
https://mimangagastrica.com.mx/
Sobre el Autor: Héctor
Bernal Velázquez, es un cirujano Bariatra certificado, director del Centro
Internacional de Cirugía de Obesidad Chihuahua; apasionado de la cirugía de
obesidad; su entrega y compromiso con la seguridad para cada uno de sus
pacientes es uno de sus grandes distintivos. Referente Internacional en Cirugía
de Manga Gástrica, con la experiencia de más 2500 casos de éxito y pacientes de
10 países distintos.
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